Mis abanicos duermen
o mientras no los veo
tal vez conversan
reclaman el hacinamiento
se empujan para desentumirse

tal vez gritan mi nombre

para que tome uno
cuando lo necesite,
cuando todo esto pase
y cuando alguna tarde
festeje en cualquier parte
su viento de colores.

Marcia Trejo "Kikey"

 

La casa estaba llena de fantasmas. Los conocí a todos. Había percudidos y prístinos, había simpáticos y gruñones, pero todos eran buenos vecinos.

No supe por qué se fueron. Ahora la casa es una lavandería y cuando veo alguna sábana, la saludo discretamente y le sonrío.

Marcia Trejo “Kikey”

“La escritura y la felicidad me fueron enseñadas como una misma cosa. No tengo cómo pagar semejante herencia. Como una misma cosa aprendí las palabras y la fiesta, la conversación y la leyenda, el juego y la sintaxis, la voluntad y la fantasía. Como una misma cosa miro mi historia y la del mundo en que crecí y al que vuelvo sin tregua lo mismo que quien vuelve por agua”.

Ángeles Mastretta

Camino tratando de no pensar en ti...
tropiezo con una palabra o dos
con una piedra de palabras
con una montaña de palabras
todo me hace recordarte
fracaso, pero sonrío.


Marcia Trejo "Kikey"