Oír al mundo como se oye a la lluvia entender a cada ser como si se entendiera la vida.
y creemos que es tiempo
que es nuestro
pero al tomarlo lo vemos picoteado
roto, sangrando
lo vemos perdido.
La vida no es una cascada cristalina
es un río que nos esconde la verdad
creemos entender y esa agua se va
inclemente cambia
nos deja desconcertados.
Ningún atardecer es igual
aunque todos sean hermosos.
No queda pues
más que soltarse al viento
y confiar en que lo que queda
lo que sea que sí tengamos
sea tierra firme.
Marcia Trejo “Kikey”